Erizo es un rompecabezas que presenta un elevado número de piezas. Aunque es simétrico, las piezas son muy dispares. Presenta una manejabilidad bastante complicada y requiere de un uso intensivo de la lógica y visión espacial para resolverlo.
Por si fuera poco lo previamente nombrado, las piezas se agrupan en dos colores, y es importante para resolverlo que los colores estén distribuidos de la forma correcta. Es difícil saber por dónde empezar una vez se desmonta pero presenta una serie de puntos débiles que detectaremos con el uso de la lógica y que nos ayudarán muchísimo a la hora de resolverlo, bajándole un poco la dificultad, que para este rompecabezas se encuentra en el nivel 4.
Recomendado para ya iniciados en el mundo de los rompecabezas, es un problema que puede sobrepasar en las fases iniciales de montaje a quienes no tienen experiencia previa, por lo que se recomienda un mínimo de experiencia.
Por su llamativo aspecto, es ideal también como elemento decorativo, una vez montado.
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